Entre las recomendaciones tras la cirugía Lo más aconsejable es ingerir alimentos líquidos, fríos y tomar algún analgésico para poder mermar el dolor posterior a la operación. En este sentido, el paciente no presenta mayores inconvenientes que le dificulten la vida cotidiana, por lo tanto podía proseguir normalmente con su rutina diaria.
Una vez que el paciente es operado y se le extirparon las amígdalas, su sistema inmunológico sigue exactamente igual que antes y está en perfectas condiciones para continuar con su vida normal.
La extracción de las amígdalas, o bien su nombre técnico es amigdalectomía, se realizan porque las mismas pueden llegar a presentar cierta dificultad en el paciente. Algunas de las causas más comunes son:
Por qué es aconsejable la extirpación de las amígdalas
Otro de los mitos que hay es el hecho de que el paciente podría ser demasiado joven para que se le realizara la operación, pero en realidad a partir de los dos años de edad la extracción de las amígdalas es viable.
En la actualidad existen ciertos mitos urbanos que hablan acerca de la reaparición de las amígdalas en ciertos pacientes previamente operados de amígdalas, esto es totalmente erróneo, ya que las amígdalas tras ser extirpadas no reaparecen esto si puede ocurrir con las vegetaciones o adenoides.
Las amígdalas durante mucho tiempo fueron operadas para evitar infecciones de repetición y en otros casos mejorar la respiración del paciente que podía tener ronquidos o apneas del sueño con un mal descanso nocturno, sueño agitado y ruidoso. Alrededor de las amígdalas existen diferentes mitos que hoy nos encargamos de develar.